Cuando queremos renovar nuestra página web surge la incógnita de si nuestro hosting actual soportaría una renovación total.
Para esto necesitamos entender que necesidades vamos a requerir a medida que evolucione nuestro proyecto.
La primera pregunta que nos debemos plantear es ¿Qué es un Hosting y un Dominio Web?
Un hosting web es el servicio que se contrata a un tercero para que aloje los datos de nuestra página web fisicamente. Para que nos entendamos, algo así como una parcela de un disco duro accesible desde internet. Ok, ahora estarás pensando… ¿Pues por que no puedo usar mi propio ordenador para alojar mi web?
Por poder se puede. Pero la diferencia entre hacerlo en tu casa y contratar un servicio que te ofrezca la posibilidad de almacenar todo la información importante de tu página web es bastante amplia.
En primer lugar los servicios de hosting ofrecen un soporte físico de almacenamiento instalados en unos ordenadores especiales, llamados servidores. Estos ordenadores tienen la capacidad de admitir la entrada de múltiples usuarios al mismo tiempo. Cosa que los ordenadores comunes y personales no tienen.
En segundo lugar, los servicios de hosting ofrecen una serie de servicios de seguridad que un usuario común no suele tener la capacidad de gestionar de forma independiente. Edad se producen millones y millones de ataques de ciber-criminales a páginas web de todo el mundo. Da igual que tu página web no sea importante. Para un ciber-criminal podría servir de uso «zombi» para propósitos varios. Por tanto, que si vas a usar datos personales de tus clientes, es obligatorio usar un servicio que proteja adecuadamente esos datos.
En resumen, a la hora de elegir un servicio de hosting debemos tener en cuenta básicamente estos dos factores: cuantas visitas vamos a recibir al mes, y qué tipo de protección de seguridad será la más recomendada para nuestra página web.
Según marca la ley, si es una página comercial y vamos a realizar transacciones o manejar datos sensibles de personas. Nuestra página web necesitará de una encriptación extra para proteger los datos. Necesitaremos un certificado SSL. Así pues deberemos buscar un servicio de hosting que ofrezca esta característica de un modo fácil y sencillo de gestionar.
Si nuestros objetivos a corto plazo es mandar una cantidad considerable de tráfico web deberemos buscar un hosting que ofrezca un ancho de banda holgado para que pueda admitir esos picos de visitas.
Por último debemos tener en cuenta que si queremos una página web con imágenes con la máxima resolución posible, lo cual hará más atractiva nuestra página. Tendremos que fijarnos en el espacio de almacenamiento web que estamos contratando y si permite algún tipo de mejora de la carga de datos para mejorar la velocidad de carga. Algunos servicios de hosting ofrecen servicios de caché especiales para reducir considerablemente los tiempo de carga. Esto es bastante importante puesto que una página que tarda más de 3 segundos en cargar agota la paciencia que un usuario espera para cargar una determinada página web y finalmente desiste y cierra la ventana.
Por experiencia (y he probado bastantes) recomiendo Webempresa. Un servicio que te permite crecer a un ritmo muy cómodo y ofrece todas las características que he estado comentando en este artículo.