Hay muchos tipos de aplicación web diferentes.
En esta entrada del blog, discutiremos los diferentes tipos y daremos ejemplos de cada tipo.
También hablaremos de las ventajas e inconvenientes de cada tipo. Entonces,
¿cuáles son los diferentes tipos de aplicaciones web?
Averigüémoslo
Tener presencia en internet, no significa estar obligado a tener una página web a través de la que vender cosas, lo que entenderíamos como una tienda online.
Si no que directamente puede ser un portal para ofrecer una determinada información para el usuario, a modo de publicidad o también ofrecer un servicio determinado a modo de complemento.

Aprovechando las posibilidades que nos ofrece internet, además de disponer de una página web, cada vez son más las empresas que cuentan con un tipo de aplicación web propia y en este sentido, es donde existe una gran disyuntiva, si tener una aplicación web, tener una aplicación móvil o directamente disponer de las dos.
En este caso, vamos a tratar de ver las diferencias que existen principalmente entre unas y otras, conocer las ventajas y los inconvenientes derivados de utilizarlas, desde el punto de vista empresarial, conociendo también como pueden afectar al consumidor y tratar de ofrecer algunas consideraciones finales acerca de las mismas. Empecemos.
Contents
Tipos de Aplicaciones Web
Cuando nos referimos a un tipo de aplicación web, estamos hablando de un cierto tipo de aplicación que se encuentra subida a internet y que para acceder a la misma lo tenemos que hacer a través de una dirección.
Estas aplicaciones web son algo más rudimentarias en comparación con las aplicaciones móviles pero sin embargo, tienen algunas ventajas que las hacen resultar a día de hoy bastante interesantes.
Una aplicación web para que funcione bien, tiene que contar con un diseño web responsivo, también conocido como diseño web sensible o con un diseño web adaptable, o a través de sus términos en inglés, diseño web responsive o diseño web adaptive.
Este tipo de diseño, es un tipo de diseño web adaptado a todos los dispositivos. Básicamente, lo que viene a significar es que al estar nuestra aplicación web subida a internet, se puede acceder a la misma a través de cualquier tipo de dispositivo.
Esto quiere decir que no importa si estamos navegando a través de un ordenador portátil, una tablet o un teléfono móvil, el diseño de la página se tiene que poder adaptar para que la navegación sea correcta y fluida.
En este sentido, estamos hablando de como la página se adapta a diferentes tipos de pantalla, dependiendo del tamaño de las mismas con el objetivo de que la página siga siendo amigable a la hora de navegar y no se vuelva un completo desastre.
Tipos de aplicación web «responsive» o «adaptable» dentro de los tipos de aplicaciones web.

Evidentemente, utilizar este tipo de diseño web responsive es una opción, pero es bastante recomendable ya que de no utilizarlo, es bastante probable que la página pierda una gran cantidad de visitas, sobre todo porque hoy en día cada vez son más los usuarios que acceden a internet a través de sus dispositivos móviles.
Una de las ventajas que tiene el utilizar este tipo de diseños sensibles es que únicamente necesitaremos un diseño para nuestra web, por lo que no tendremos que andar pensando en diferentes diseños dependiendo de la pantalla del dispositivo que visite nuestra página.
Gracias a este diseño, nos aseguraremos de que todos los dispositivos pueden navegar a gusto, consiguiendo una experiencia de uso satisfactoria teniendo en cuenta este diseño web para móviles.
El diseño web responsive es más recomendable que el diseño web adaptativo ya que en el primero, no tendremos que preestablecer ningún tamaño de antemano y todo se adaptará mucho mejor.
Sin embargo, las razones de presupuesto pueden influir a la hora de utilizar un diseño u otro pero desde luego, sí que tenemos que tener en cuenta que para mejorar la navegación móvil de los usuarios, hace falta un diseño u otro.
En definitiva, lo que estamos haciendo con estas aplicaciones web es disponer en nuestro propio servidor de una aplicación para que accedan los usuarios.
Sin embargo, estos usuarios no podrán acceder a la misma si no disponen de una conexión a internet? este es uno de los mayores peros que veremos más adelante de estas aplicaciones web.
Con la proliferación del uso del teléfono móvil, también se han disparado las descargas de aplicaciones móviles, que es lo que vamos a ver ahora.
Aplicaciones móviles

Por el otro lado, nos encontramos con las aplicaciones móviles.
Estas aplicaciones son de lo más exitosas hoy en día ya que cada vez son más las personas que cuentan con un Smartphone y además, poseen conexión a internet.
Las aplicaciones móviles se tienen que instalar en los dispositivos de los usuarios pero cuentan con la principal ventaja de que siempre pueden acceder a la misma, incluso si no cuentan con conexión a internet, siempre que la aplicación no dependa de ello, por supuesto.
Estas aplicaciones móviles, por norma general se encuentran subidas en la tienda de aplicaciones del propio teléfono y el propietario de la misma puede permitir su descarga gratuita o cobrar por la propia aplicación.
Una vez dentro de las mismas, las opciones de una aplicación pueden ser las mismas que las de una aplicación web, es decir, podremos consultar un catálogo, comprar en la tienda? en definitiva, todo tipo de funciones que se hayan querido incluir en la misma, con la salvedad de que estas aplicaciones móviles están realmente optimizadas para los dispositivos que la usan ya que evidentemente, están realmente diseñadas para ello.
Ahora que conocemos un poco mejor lo que son estas aplicaciones móviles, vamos a explicar las diferencias principales que existen entre estas aplicaciones móviles y las aplicaciones web.
Principales diferencias entre las aplicaciones web y las aplicaciones móviles
Empezaremos con el acceso a la propia aplicación. Para acceder a una aplicación web, es indispensable disponer de una conexión a internet.
Esta aplicación web se encuentra subida en la red en el servidor de la empresa, o en el de la empresa que haya contratado a tal efecto y para poder acceder a la misma es inevitable tener que hacerlo a través de internet.
De no tener conexión, el acceso es completamente imposible.
Por otro lado, una aplicación móvil puede estar desarrollada para que se pueda acceder a ella en todo momento, sin tener la necesidad de estar conectado a internet.
Para poder acceder a una aplicación móvil, previamente la tenemos que tener instalada en nuestro terminal móvil y por lo tanto, somos nosotros los que estamos dando soporte y albergando la misma en nuestro terminal.
De este modo, podremos acceder a ella siempre que queramos independientemente de que tengamos conexión o no.
Otro aspecto sería que si evidentemente para llevar a cabo alguna opción dentro de la propia aplicación es necesario internet, requeriremos del mismo para poder funcionar con ella a su máximo esplendor.
El mejor ejemplo sería el proceso de compra a través de la aplicación, si no tenemos forma de comunicarnos con la tienda, será imposible llevar a cabo el proceso.
Otro aspecto que es bastante importante a la hora de comparar estos dos tipos de aplicaciones, es el desarrollo de las mismas.
En este caso, una aplicación web cuenta con mayores ventajas ya que cuenta con un desarrollo único, a través del cual se podrán conectar todas las plataformas.
Podemos desarrollar nuestra aplicación web a través de un lenguaje de programación web como por ejemplo Javascript y una vez que hayamos desarrollado la aplicación, esta será accesible a cualquier tipo de usuario independientemente de donde se conecte.
Por otro lado, las aplicaciones móviles son bastante más restrictivas y es que el desarrollo de las mismas difiere bastante según el dispositivo en donde se vayan a utilizar.
En este caso, existen diferentes lenguajes de programación en los dispositivos móviles y por lo tanto, no es igual desarrollar para un sistema Android que para un sistema iOS.
Esto termina por ofrecer mucho más trabajo y por supuesto tener que desarrollar varias aplicaciones diferentes para que puedan funcionar en diferentes dispositivos.
Para liar todavía más el asunto, dentro de estos sistemas operativos de las aplicaciones, nos encontramos con fabricantes diferentes que además de aplicar capas de programación a sus sistemas, ofrecen diferentes versiones de los mismos por lo que estas aplicaciones, tienen que estar perfectamente pensadas para funcionar en un dispositivo móvil, independientemente de la marca que se trate.
El último aspecto que nos tocaría comparar, sería el coste. En términos económicos, una aplicación para móvil cuenta con un coste bastante más elevado a la hora de desarrollarse.
La razón es bastante sencilla. Basta con pensar que cuando hemos desarrollado una aplicación web, nosotros podemos modificarla en cualquier momento, añadir cualquier mejora o implementar cualquier tipo de fallo, por lo que siempre que se conecten los usuarios a nuestra propia aplicación web, les estaremos mostrando lo que queremos que vean en cada momento.
Por otro lado, cuando hablamos de las aplicaciones móviles, tenemos que recordar el punto anterior donde tenemos que desarrollar una aplicación diferente para cada dispositivo y además, tener en cuenta cada uno de los modelos en donde queramos que nuestra aplicación pueda ser instalada y a día de hoy, existen muchos.
Por otro lado, es el propio usuario el que tiene la aplicación instalada y la tiene instalada en un dispositivo que no se encuentra únicamente pensado para nuestra aplicación, si no que tiene que vivir con una gran cantidad de funciones que también tenemos que tener en cuenta para que no existan problemas que hagan el uso incompatible, debido a que falle por algún que otra función.
Además de esto, no podemos actualizar la aplicación al usuario al instante, por lo que una vez que hemos actualizado la aplicación, el usuario se la tiene que descargar de nuevo para poder actualizarla y así contar con la experiencia de uso mejorada.
Por último, ni que decir tiene que cuando actualizamos una aplicación móvil, nos sucede igual que antes, que no es lo mismo hacerlo para Android que para iOS, por lo que el coste de desarrollo en este aspecto vuelve a ser el doble.
Pros de las aplicaciones web en relación al Marketing Digital

La aplicación web es mucho más fácil de desarrollar que una aplicación para móvil. Esto es debido a que los lenguajes de programación que utiliza, son bastante conocidos por los programadores por lo que además de haber una mayor cantidad de profesionales que llevan a cabo este trabajo, resultará más barato contratarlos, ideal si estamos empezando en nuestro negocio.
Además de esto, tenemos la ventaja de que con una aplicación, llegaremos a todo tipo de dispositivos. No importará si estás navegando desde un ordenador o un teléfono móvil de la marca que sea, nuestra aplicación será universal para todo el mundo y bastará simplemente con conectarse a la página para poder disfrutar de ella.
Otra de las ventajas con las que cuentan estas aplicaciones web, es que no tienen la necesidad de estar instaladas en ningún dispositivo.
Si no tienes memoria en un teléfono móvil o no quieres andar liado descargando cosas e instalado, siempre podrás acceder a una aplicación web a través de su dirección
Por último, eres el único responsable de la propia aplicación web.
Esto quiere decir que no dependerás de terceros como en el caso de las aplicaciones móviles que deben de descargarse de una tienda del propio teléfono, por lo que ahorrarás una buena cantidad de dinero ya que no tendrás que tener la aplicación almacenada en ningún lado.
Contras de las aplicaciones web en relación al Marketing Digital
El uso del responsive es casi obligatorio.
Está muy bien que puedas llegar a todos los dispositivos a través de tu aplicación, pero ten una cosa clara, si no se visualiza de la forma correcta, es bastante probable que la experiencia de uso sea negativa y eso es lo peor que le puede pasar a cualquier aplicación.
Principalmente por este motivo, el uso del responsive es tan necesario.
Por otro lado, está muy bien no depender de ninguna tienda de terminales móviles, pero también estarás dependiendo de otros aspectos, como por ejemplo el servidor en donde la tienes almacenada.
Por el motivo que sea, si el servidor va lento, la aplicación web tardará más en cargar y será también una experiencia de uso negativa.
Además de esto, depender de una tienda no es del todo malo, ya que en muchos aspectos esta genera visibilidad, por lo que una aplicación web puede que sea algo más difícil de conocer.
Por último, tal vez el aspecto más determinante y a través del cual se entiende mejor el punto anterior, la conexión a internet es necesaria.
Si el usuario no dispone de conexión a internet, nunca podrá acceder a la misma a diferencia de lo que ocurre con una aplicación para móvil.
Pros de las aplicaciones móviles en relación al Marketing Digital
La experiencia de usuario en una aplicación móvil, es casi siempre placentera.
Al no tener la necesidad de disponer de responsive como hemos visto con las aplicaciones para web, una aplicación para móvil siempre se encuentra desarrollada pensando en el teléfono o tablet en donde se va a incluir.
De esta forma, el diseño siempre tiene en cuenta el tamaño de la pantalla o la ubicación de los botones, para hacer que la navegación sea fácil e intuitiva, mejorando por mucho, la experiencia de uso.
Como hemos visto antes, una aplicación móvil depende de una tienda de un dispositivo móvil. De esta forma, estas tiendas consiguen que las aplicaciones lleguen a una mayor cantidad de usuarios.
Esto es posible básicamente porque las tiendas agrupan las aplicaciones en cuanto al tipo de refiere, por lo que tenemos una tienda de ropa y nuestra aplicación queda agrupada en el epígrafe moda de la tienda, cualquier persona que visite dicho apartado podrá tener constancia de nuestra aplicación a diferencia de lo que sucede con una aplicación web en la que si no sabes la dirección de la misma, difícilmente puedes acceder a ella.
Por último, uno de los factores más interesantes con los que cuenta es poder acceder a la misma sin conexión a internet.
Muchas de estas aplicaciones móviles no la necesitan y para ofrecer un catálogo, fotos, información o cualquier otro aspecto para el que no se necesite estar conectado a la red, es una ventaja que podamos acceder a la misma ya que se encuentra instalada en nuestro dispositivo y no tendremos la necesidad de conectarnos a ningún servidor remoto para poder visitar la misma.
Desventajas de las aplicaciones móviles en relación al Marketing Digital

Una de las principales desventajas que tienen las aplicaciones móviles es el costo de desarrollo que tienen.
Como hemos visto, en su diseño tenemos que tener en cuenta diferentes sistemas operativos para desarrollarlas.
Esto implica, que tengamos que desarrollar una misma aplicación desde cero varias veces, para según el lenguaje de programación con el que nos encontremos trabajando.
Por otro lado, entrar en una tienda de descargas de aplicaciones no es sencillo. Para filtrar el continuo flujo de aplicaciones móviles que existen y poder ofrecer un mejor servicio de calidad, hace falta disponer de una aplicación bastante bien pulida de cara a poder acceder a dicha tienda.
Esto es un escollo para aquellos que están iniciándose en su empresa ya que las aplicaciones en un principio suelen ser menos maduras.
Por otro lado, es evidente que disponer de una aplicación mejor desarrollada, tendrá un coste más alto ya que llevará más horas de trabajo.
Para acabar, la constante actualización de los dispositivos móviles y la gran cantidad de funciones con las que cuentan, hace que tengamos que trabajar en nuestra aplicación con más frecuencia.
En este sentido, no bastará con desarrollar la aplicación y desentenderse de ella, ya que la tendremos que dar un soporte de cara a las diferentes actualizaciones que tengan los terminales, para asegurar su correcto funcionamiento y que no de errores con los diferentes cambios de sistema que pueda haber.
Consideraciones finales, ¿qué aplicación debo de elegir?

Si después de haber leído todo esto, todavía no tienes claro que tipo de aplicación necesitas para tu empresa, la respuesta que tenemos para ti no es del todo sencilla.
Esto es básicamente debido a que depende de muchos factores.
Si te encuentras iniciando la actividad, es bastante probable que una aplicación web sea algo más accesible debido a que es más económica y mucho más fácil de desarrollar.
Sin embargo, dependiendo de la naturaleza de la empresa, lo que pretendas conseguir con tu aplicación o como la quieras orientar, puede que te resulte más interesante el disponer de un tipo de aplicación o de otra.
En esencia, desde aquí te podríamos recomendar que lo más importante sería disponer de las dos opciones, siempre y cuando te lo puedas permitir económicamente, pero de esta forma, te asegurarías de llegar a todo tipo de usuarios y además podrías complementar la una con la otra.
Teniendo en cuenta esto, no existe una aplicación indicada ni para cada tipo de negocio ni para cada tipo de usuario.
En primer lugar lo que tienes que tener claro, son los objetivos de la empresa y tratar de concluir como vas a llegar hasta ellos.
Si crees que en tu estrategia de marketing digital es completamente necesario el disponer de un tipo de aplicación en concreto, adelante, vuélcate con ello, pero para empezar, en ningún momento estás obligado a disponer de una de estas, es algo que podrá ir llegando con el tiempo.
En definitiva, antes de disponer algún tipo de recurso para este apartado, plantéate que es lo que pretendes obtener con el mismo y en que puede mejorar tu negocio.
Analiza los pros y las contras y trata de extrapolarlos a tu empresa, solo de esta manera, sabrás que tipo de aplicación es la más indicada para tu negocio.